lunes, 3 de noviembre de 2014

Estoy en ascuas.

Supongo que hay momentos en los que no te puedes quedar. Pestañeé y desperté un lunes,  es noviembre y ya no oigo el mar, no siento el calor y no escucho sus estúpidas anécdotas
(y otras no tan estúpidas) .

Supongo que ya entiendo eso de que lo bueno se hace esperar.
Es peor recordar que echar de menos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario